¿Qué es un ensayo clínico y cómo funciona?
Déjanos preguntarte: ¿Alguna vez has considerado probar un tratamiento “alternativo” que no ha sido aprobado por las autoridades sanitarias de tu país? Quizás has visto anuncios en línea o en revistas sobre tratamientos “milagrosos” para una variedad de afecciones, desde el acné hasta el cáncer.
Es importante tener en cuenta que estos tratamientos no han sido evaluados por las autoridades sanitarias, lo que significa que su seguridad y eficacia no han sido comprobadas. De hecho, algunos de estos tratamientos pueden ser perjudiciales para tu salud y, en algunos casos, incluso pueden agravar tus afecciones.

Por eso es fundamental que sigas los tratamientos aprobados por las autoridades sanitarias, como la FDA en Estados Unidos. Estas organizaciones, junto con los laboratorios, realizan rigurosos ensayos clínicos antes de aprobar un tratamiento para su uso en humanos. Son estudios controlados y aleatorios que se llevan a cabo en humanos para evaluar la seguridad y la eficacia de un nuevo tratamiento o medicamento.
Ensayo clínico
En un ensayo clínico, un grupo de personas reciben el tratamiento en cuestión mientras que otro grupo recibe un placebo o un tratamiento estándar. Los resultados se comparan para determinar si el tratamiento nuevo es más seguro y efectivo que los tratamientos actuales.
El ensayo clínico cuenta con etapas de pruebas en animales, o en laboratorios in vitro, antes de su aprobación para simplemente probarlos en humanos.
Además, son supervisados por expertos médicos y representantes del estado, lo que garantiza que se lleven a cabo de manera ética y segura. De esta manera, las autoridades sanitarias pueden tomar una decisión informada sobre si aprobar o no un tratamiento para su uso en personas.
En resumen, es muy importante evitar los tratamientos no aprobados por las autoridades sanitarias. Estos tratamientos pueden ser perjudiciales para tu salud y no han sido evaluados para garantizar su seguridad y eficacia. En cambio, es recomendable seguir los tratamientos aprobados por las autoridades sanitarias, que han sido evaluados a través de rigurosos ensayos clínicos. ¡Cuídate!